jueves, febrero 09, 2006
En la frontera de los grupos sociales...
A ver si me explico. En la sociedad actual en que vivimos se tiende a estereotipar a las personas de acuerdo a la imagen, sus ideas, su forma de vestir, etcétera. Luego entonces tenemos a los fresas, nacos, darketos, punketos, skatos, intelectuales, snobs, losers, wannabes y un largo etcétera. Hablo de mi caso en particular al sentirme en los bordes que separan, por ejemplo, a los nacos de los fresas. Para los fresas soy un personaje raro, para los nacos no soy un fresa pero se me considera un ente aparte. Es decir que estoy justo entre la frontera que divide a la burguesía del proletariado y/o lumpen-proletariat. Puedo escuchar con sumo agrado la Fuga de Bach, el Concierto de Bartok en C, la Overtura de 1812 o la Cabalgata de las Valkirias, pero también puedo comprarme el CD de Shakira. Puedo estar en una cena muy elegante con distinguidos miembros u hombres de negocios deleitándome con una cena de quiché de salmón y al otro día cenar unos tacos a las afueras del metro Chilpancingo. Puedo leer con sumo agrado Deseo de Jelinek y por ahí estar viendo una sitcom norteamericana como Frasier, Seinfeld y Los Simpsons. Puedo ir en medio del tráfico con mi Tsuru II del 92 o estar en medio de los apretones que se dan en los vagones del metro en hora pico. Puedo estar alejando totalmente de la televisión y a su vez observar con agrado un partido de fútbol. Pero si es un dilema estar a medio camino entre las ideas burguesas y los pensamientos del pasajero que comparte asiento contigo en un microbús. El chiste de todo esto es disfrutar lo bueno de la vida y aceptar las cosas malas con la mejor entereza posible…pero aún así siempre resultará muy extraño estar en los límites de las subculturas, de no pertenecer a ninguna de ellas y de tratar de ver las cosas con la mayor objetividad posible…