miércoles, enero 24, 2007

Pobres niños ricos

El año pasado ocurrió un suceso que llamó mucho la atención en el país: el caso de un wey llamado Diego Santoy y su novia Erika. No he querido decir "conmocionó" porque se me hace de muy mal gusto (fíjate, fíjate, fíjate). Al menos en esas fechas a mi me valió madre pero pues ya saben como son los noticieros, medios, revistas y etcétera: le dieron difusión al evento como si se tratara de la Masacre de Columbine. Aquí hago un paréntesis: como se trató de fresas pequeño-burgueses de la próspera ciudad de Monterrey, el crimen del wey del Santoy no pasó desapercibido y cimbró las "buenas conciencias" de todo el país. Digo, si hubiera pasado en una zona marginal de Ciudad Juárez o en la selva chiapaneca, igual no pasa ni madres y ni hubiera sido noticia, sin embargo a este chulo se le ocurrió darle matatena a los dos hermanitos de su morra, la cual a su vez es hija de una señora que daba los horóscopos (loable trabajo, si es que puede llamársele trabajo) en un canal de TV; bueno esa es la versión oficial a un año de los hechos.

De acuerdo a mis distinguidos amigos y espías regios, el carita del Santoy le ponía con la mamá (quien por cierto no está de malos bigotes) y pues bien drogados ambos chavos (la dulce Erika y el mozalbete Diego) acabaron con el par de morrillos. El hecho de que el cabrón le estuviera poniendo con la mamá de su novia da para moverle el morbo a una enorme masa humana que saca a flote sus más íntimos y cochinos deseos sexuales. Obvio, ¿a qué morrito en edad de la punzada no le gustaría tirarse a su novia y al mismo tiempo que la muy deseable mamá de la ninfeta se bajara a realizarle sexo oral? Con lo que no contaba el buen Diego es que al enterarse su novia (eso dicen) ésta montara en cólera y pues como dicen "Dios te cuide del rayo y de una mujer despechada" (esa me la acabo de inventar); Erikita en venganza y odio hacia la traición materna y al más puro estilo tragedia griega, se desquitó con los dos parvulitos que eran sus hermanos y pidió ayuda al novio para lograr tan sangriento (ñaca, ñaca) objetivo.
Esa es una de las teorías que se manejan. Es obvio que el wey es culpable porque huyó. En todo caso si yo no soy culpable no me pelo. Más aún, si la teoría de que Erikucha también fue co-partícipe del crimen, le pone más pimienta al guiso.
Lo que llama la atención, lo repito, es el morbo...¿acaso porque la mamá era una figura pública, a nivel local si quieren, pero figura pública al fin?
El chiste es que a un año de los hechos llama la atención que le sigan dando seguimiento a un caso tan sórdido. Es de risa que hasta fans del tal Diego hayan surgido (lo que me da a pensar que estos fans tienen el coeficiente intelectual de una lombriz de tierra) y ´pulularon además las camisetas con la leyenda "te cuido a tus hermanitos...y a tu mamá también"...y repito la pregunta: ¿qué hubiera pasado si este mismo caso se hubiera dado en zonas de pobreza marginal? Les aseguro que sólo hubieran obtenido una notilla en un periodicucho especializado en nota roja y una mención en un noticiero radial de poca monta, si acaso la comidilla de la colonia pero hasta ahí. Si Andy Warhol meditaba acerca de que cada uno de nosotros tendríamos cinco minutos de fama, este par de pobres niños ricos han tenido más de la que realmente merecerían. Fue por el asesinato de dos niños que ni "vela tenían en el entierro" pero que pagaron una noche de pendejadas de dos adolescentes poco-seso. Al igual que la Masacre de Columbine, este caso demuestra que la sociedad del planeta entero está enferma hasta la médula de los huesos, la pregunta aquí es: ¿qué estamos haciendo mal los adultos para que los adolescentes piensen de una forma tan idiota?